NO NOS SOBRA NINGÚN PRODUCTOR

Abr 11, 2018

CONINAGRO, en su afán de representar más cabalmente a las economías regionales, a fin de mejorar la situación de los productores, se ha abocado de lleno, con sus dirigentes, gerencia y equipos a trabajar para ellos. “No nos sobra ningún productor”, afirmaría una dirigente, Hilda Vairetti, productora mendocina. Este es nuestro desvelo: Que se produzca más pero también con más productores no con menos.

Como dirigentes nos exigimos un planeamiento estratégico para dar a conocer opinión y acciones sobre cada una de ellas. Entre todos llevamos a cabo esta tarea. Realizamos giras por las provincias donde hay asociados, visitamos cooperativas, nos encontramos con productores, participamos de las reuniones de las Comisiones Asesoras Regionales (CARes), y nos sumamos a encuentros donde participan productores ya sean exposiciones o ferias regionales.

Como cooperativistas estamos convencidos acerca de las formas de realizar nuestra gestión gremial. Y en cuanto al país creemos con convicción que el asociativismo es la más clara alternativa para que la ruralidad sea una solución para el crecimiento y desarrollo económico de la Argentina. Estamos convencidos que el campo es el motor del país.

Afortunadamente, el gobierno también da señales de compartir nuestra visión. Y nos da un espacio de diálogo que sabemos aprovechar para acercar los temas que preocupan a nuestros representados. En ellos esta nuestra fortaleza, y por ellos recorremos el país registrando sus inquietudes y sus demandas. Allí donde está un productor cooperativo, esta CONINAGRO. Y queremos ir haciendo realidad esta premisa. Apostamos al crecimiento, con ideas y propuestas claras, con gestión y acción en el cada lugar.

Tenemos un gran desafío para los días por venir. Los productores agropecuarios cooperativos somos, junto a las cooperativas, una alternativa a la concentración. Con sinergia, con una fuerte acción sobre el desarrollo local, somos opción para miles y miles de hombre de campo, de empresarios pequeños y medianos que buscan proyectarse, asociándose, buscando escala sin descuidar los valores de un movimiento que tiene larga historia en el país.

Con este escenario, nos preparamos como ciudadanos, para transitar un año electoral que no puede mantenernos ajenos. Debemos ser protagonistas para exigir que los candidatos, y luego los legisladores elegidos, acerquen a los ámbitos de debate y discusión los proyectos y propuestas que nuestras actividades ameritan para seguir creciendo y para seguir proyectando al país productivo hacia el destino de grandeza, tan ansiado como inevitable.